La festividad de la Asunción de la Virgen lleva unida en Mallorca la tradición de instalar los llits de la Mare de Déu. En Palma, concretamente en Santa Eulàlia, la hermosa talla de la Virgen Dormida del siglo XV fue depositada en el lecho colocado cerca del portal mayor. Allí permanecerá durante la octava, y el día 22 de agosto después de la misa vespertina será trasladada de nuevo al camarín, y los fieles recibirán el obsequio de la aromática alfabaguera.
Desde ayer ya se puede admirar el monumental lecho de la Dormición de la Virgen. La preciosa talla de la Virgen yacente destaca por su policromía y por la riqueza de su vestidura. El montaje se remonta al siglo XVI y el actual conjunto es de estilo barroco, del siglo XVII y la imagen de María, gótica del siglo XV. De estilo barroco son también los ángeles portadores del dosel.
Con mayor solemnidad y asistencia de muchos fieles que mantienen la tradición se instaló en la iglesia del monasterio de La Concepción. El monumento de este recinto se considera el más bello y espectacular de Palma. En este aspecto tiene mucho que ver el esmero que ponen las monjas en cuidar multitud de detalles. El traslado de la Virgen estuvo presidido por el padre Sebastián Oliver, precedido por muchos fieles que participaron en la procesión por el claustro monacal.
La talla, obra del escultor Michel Barceló, fue trasladada a hombros por miembros de la cofradía de penitentes Cristo de los Navegantes. Desde el claustro fue introducida en la iglesia y desde el altar mayor la llevaron por el centro hasta el precioso tálamo, que lució con sus ángeles adornado con muchas macetas y flores.