El día de Sant Jaume volverá a ser festivo en Balears. Esta decisión fue adoptada ayer por el Consell de Govern, que aprobó el calendario de días festivos para el año 2002 en el ámbito de Balears. El Ejecutivo autonómico también mantendrá como festivo el Dijous Sant, que en 2002 no será recuperable, tal y como ha ocurrido este año. El hecho de que algunos festivos tradicionales coincidan en domingo "el 6 de enero y el 8 de diciembre" ha permitido al Govern recuperar algunas fiestas tradicionales de Balears que, por distintas cuestiones, habían sido sustituidas. El caso más significativo es el día de Sant Jaume, que desde hace algunos años había dejado de ser festivo tras la decisión del Govern de declarar el 1 de marzo como Día de les Illes Balears e incorporarlo al calendario de festivos.
El 2002 será un año de «puentes», ya que seis festivos permiten esta posibilidad. Se trata del 1 de enero, que cae en lunes; el 1 de marzo, que cae en viernes; el 15 de agosto, que cae en jueves; el 1 de noviembre, que cae en viernes; y el 6 de diciembre, que también cae en viernes. Además de acordar el calendario de festivos del próximo año, el Govern ha vuelto a reclamar "ya lo hizo el año pasado" que el Gobierno central tenga en cuenta las peculiaridaes especiales de Balears para permitir que los consells insulars puedan decidir un día festivo en cada isla.
El Ejecutivo balear considera que la existencia de cuatro islas, con tres consells insulars y la naturaleza mixta de estas entidades territoriales, crea unos problemas que deben ser atendidos, sobre todo cuando, por la legislación estatal, únicamente «podemos designar días festivos las comunidades autónomas y los municipios». El Govern cree que los consells no pueden ser considerados como «simples diputaciones provinciales».
Para evitar estas situaciones, el Govern ha instado a las autoridades del Estado a que realicen una reforma normativa que incluya la posibilidad de que las comunidades autónomas, con administraciones insulares como los consells, puedan designar una fiesta insular y recuerda que los ayuntamientos ya pueden decidir un festivo en su municipio. En este sentido, el Govern se hace eco de una aspiración del Consell Insular de Mallorca, que reclama que el día 12 de setiembre sea festivo en toda la isla, coincidiendo con la Diada.