El curso escolar 2001/2002 tendrá 175 días lectivos, sin contar las dos fiestas locales y el día de libre elección. La Conselleria d'Educació ha aprobado el calendario escolar con el consenso de todos los sectores de la comunidad educativa: sindicatos, padres de alumnos y patronales. Las clases comenzarán el jueves 13 de septiembre en Educación Infantil y Primaria y el 18 de septiembre en Educación Secundaria, Bachillerato y FP, mientras que las enseñanzas no regladas (escuelas de idiomas, escuelas de arte y diseño y el conservatorio) comenzarán el 1 de octubre. El curso acabará el 20 de junio en Infantil, Primaria y ESO y el 21 de junio en las enseñanzas regladas.
Una novedad importante que especifica la orden del conseller d'Educació responde a una petición de los padres de alumnos según la cual todos los centros tendrán la obligación este año de acoger en el primer día de clase a los niños como un día lectivo normal, así como ofrecer todos los servicios y horario completo para comodidad de las familias. Además, este año las vacaciones de Navidad comenzarán un día antes de lo habitual, el 22 de diciembre, y finalizarán el 6 de enero, algo también poco frecuente en los últimos años, pues las clases solían reanudarse al menos un par de días después de Reyes.
Los días festivos serán los habituales, entre ellos el 7 de diciembre, fiesta escolar unificada. Igualmente serán considerados días festivos las dos fiestas locales y en caso de que éstas coincidan en días no lectivos, el centro podrá determinar, en sustitución de éstas, un único día no lectivo. Cada centro podrá establecer, además, dos días festivos de libre disposición, que pueden fijarse en cualquier mes, no necesariamente en marzo, como solía ocurrir con la Semana Blanca. Aunque el calendario se aprobó por consenso, la FAPA, un año más, reclamó, con el apoyo de Educació i Gestió, que los días lectivos sean al menos 180. «Aunque unos días más no se resolverá la calidad de la enseñanza, somos conscientes de que más días lectivos unido a la mejora de los recuroso sí se notaría», apuntó su presidente, José Luis Aparicio.