Las conselleres de Sanitat i Consum y de Benestar Social del Govern, Aina Salom y Fernanda Caro respectivamente, presentaron ayer a asociaciones, sindicatos, ONG y otras instituciones y administraciones el proyecto de Plan Sociosanitario.
El plan, basado en la consultoría realizada por la Fundació Unió Catalana d'Hospitals, sitúa las necesidades de recursos de larga estancia residencial (a partir de 20 días) en Balears entre 6.000-7.000 plazas anuales (un 4-5% de la población mayor de 65 años). La distribución de estas plazas sería de un 5-10% de alta complejidad "según recoge el borrador presentado ayer" y situadas en centros sociosanitarios complejos; un 10% de media estancia polivalente y ubicadas en todo tipo de centros; y el resto en plazas residenciales (geriátricos).
Por lo que se refiere a la atención domiciliaria se advierte que las necesidades experimentarán un fortísimo crecimiento ya que, teniendo en cuenta el envejecimiento de la población, se calcula que un 20% de los mayores de 65 años (y un 46% de los mayores de 85 años) necesitarán de atención continuada y soporte para mantener su máximo nivel funcional.
Se calcula que un 10% de la población mayor de 65 años (118.652 según el censo de 1998) necesitará a lo largo del año de algún dispositivo de atención sociosanitaria. Ello supondría tener que atender a 12.000 personas a lo largo del año y en torno a los 14.000 si se actualiza el censo.
El informe de situación pone de manifiesto el déficit cuantitativo de camas residenciales y de larga estancia con una lista de espera global de 1.400 personas (1.000 de ellas son personas que no se pueden valer por sí mismas) así como la carencia de recursos específicos alternativos al internamiento como la hospitalización parcial, Hospital de Día o programas de hospitalización domiciliaria.