Unos sesenta delegados de UGT y CC OO se concentraron ayer ante la sede de la Inspección de Trabajo en un acto que se enmarca dentro de las movilizaciones contra los accidentes laborales, que culminarán el 2 de marzo con una huelga general en el sector. Los sindicalistas reclamaron «mayor y mejor inspección laboral» para frenar los accidentes laborales.
Rogelio Marín y Eusebio Ramón, responsables del sector en UGT y CC OO, expusieron el incumplimiento «sistemático y reiterado» de las leyes y las normas por parte de los empresarios «que sólo buscan su beneficio» y la «pasividad de la Administración». Uno de los objetivos es la regulación de la subcontratación y expusieron que hay que poner tope a «subcontratistas, prestamistas y pistoleros que han convertido al sector en una jungla».
Por su parte, el conseller de Treball, Eberhard Grosske, anunció que la Comisión Territorial de la Inspección de Trabajo adoptará «medidas complementarias» para mejorar la efectividad de las inspecciones, «algunas bastante contundentes, especialmente en el sector de la construcción».