El canciller alemán, Gerhard Schröder, aprovechó ayer el encuentro con el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, en un restaurante de Santa Maria, para hablar sobre las relaciones entre mallorquines y alemanes, apuntando que «hay que desdramatizar esta cuestión».
Preguntado sobre si tenía que dar algún tipo de consejo a sus compatriotas, comentó que «no tengo que dar consejos a nadie. Los alemanes son y deben ser respetuosos con las tradiciones de los mallorquines y los alemanes, como turistas, deben ser tratados con formalidad. Es una relación que se tiene que basar en el respeto mutuo y estoy convencido de que no habrá problemas». Y como ejemplo de ello comentó las inversiones que se han realizado en el Casc Antic de Palma por parte de alemanes, «la imagen que ello ha generado es positiva y no ha habido problema alguno de convivencia». El presidente del Govern, Francesc Antich, presente también en este encuentro, valoró las palabras de Schröder al comentar que «la visita del canciller alemán a la Isla ayuda a romper la imagen de que existe una crisis en las relaciones entre alemanes y mallorquines. Esto no es así, ya que la integración se hace en todos los ámbitos, pero desde las instituciones tenemos que potenciar esto. Soy consciente de que hay una asignatura pendiente en este sentido que debemos solventar entre todos».
La reunión entre el canciller alemán y el secretario general del PSOE, Rodríguez Zapatero, transcurrió en un clima de diálogo y de sintonía. Tanto es así, que Schröder indicó que Zapatero «representa la modernidad en España y estoy convencido, después de hablar con él, que será una de las personas que más tenga que decir en el socialismo europeo». Esta sintonía y coincidencia de ideas es lo que propició que ayer ambos acordaran crear una comisión bilateral entre el SPD y el PSOE para abordar todo el proceso de construcción europea. Este grupo de trabajo estará operativo tras el encuentro previsto entre Schröder y Zapatero en Berlín el próximo mes de septiembre.