El Passeig Marítim pasará al manos del Ajuntament de Palma a partir del 1 de enero del año 2001. Este fue el acuerdo alcanzado ayer por el alcalde de Palma, Joan Fageda, y el presidente de la Autoritat Portuària, Francesc Triay.
De esta forma, Cort y el Puerto se adelantan al proceso de desafectación de la vía, una decisión ya aprobada por el consejo de administración del Puerto, que está pendiente de su aprobación por el Ministerio de Fomento y que puede tardar años. En virtud de este acuerdo, la Autoritat Portuària «regala» a la ciudad, según palabras de Triay, el Passeig Marítim. La cesión comienza en el Moll Vell y afecta a el ancho de la vía hasta el límite entre la calzada rodada y el mar, así como al paseo peatonal de Ribera.
Para ello, se creará una comisión técnica, integrada por técnicos municipales, que estudiarán las actuaciones municipales a realizar desde primeros del año próximo en la vía. Consistorio y Puerto acordaron, también ayer, que desde el 1 de julio la Policía Local de Palma pasará a hacerse cargo de la seguridad y el tráfico del Passeig Marítim. Igualmente, se creará una comisión técnica, que deberá informar sobre la regulación del aparcamiento y el tráfico.
Fageda declaró que «más adelante se podrá estudiar la creación de más plazas de aparcamientos, nuevas peatonalizaciones o cualquier otra modificación tendente a mejorar el tráfico». Tanto Triay como Fageda mostraron su satisfacción por el resultado de esta primera reunión de trabajo entre ambos.