El obispo de Mallorca, Teodoro Úbeda, presidió ayer en la Seu de Palma la celebración ecuménica interconfesional, que está considerada el acto central de la semana de la oración por la unidad de todos los cristianos. La semana comenzó el día 18 y finalizará el martes.
Católicos, evangélicos, anglicanos, luteranos y miembros del Ejército de Salvación, la Iglesia ortodoxa y otras comunidades eclesiales están participando en esta celebración, en la que la Capella Mallorquina complementó ayer la oración litúrgica.
La celebración interconfesional comenzó con una procesión en la que se portaban símbolos como la cruz (fundamento de la Iglesia y fuente de salvación), la Biblia (que contiene la palabra viva de Dios) y el cirio pascual (expresa la unidad de fe).
El «Domingo de la Unidad» ha permitido celebrar el año 2000. La misa comenzó con la confesión de fe, cantada en latín, tal y como habían pedido diversas iglesias.
Posteriormente, la Capella Mallorquina cantó un himno de alabanza y la tercera parte de la celebración ecuménica interconfesional comenzó con la liturgia de la palabra, con el Evangelio según Mateo, y la Capella Mallorquina cantó el Aleluya. La Seu de Palma registró una importante presencia de fieles, que han querido participar en esta celebración interconfesional.
Por otra parte, la Diócesis también anunció que el próximo miércoles el obispo Úbeda ordenará sacerdote al religioso de la congregación de los Misioneros de los Sagrados Corazones Miquel Darder, en una ceremonia que se celebrará en el Santuario de Lluc.