Las comunidades de propietarios de Balears han recuperado en el último año, y tras la entrada en vigor de la Ley de Propiedad Horizontal, hasta un 40% de los 700 millones de pesetas que adeudaban hasta 1998 los vecinos morosos. Jaime Morey, presidente del Colegio de Administradores de Fincas de Balears, confirmó que la nueva normativa «ha agilizado los procedimientos judiciales en contra de los morosos» y cifró en un 40% el descenso de la deuda. La cantidad de 700 millones (30.000 millones en toda España) en las Islas es un cálculo efectuado por Daniel Loscertales, ponente del nuevo texto legal.
El pago de las cantidades atrasadas en concepto de cuotas cobradas por las comunidades de propietarios, no ha frenado, en cambio, los procedimientos de embargos de pisos entre los vecinos más reacios a ponerse al día en sus obligaciones económicas. De hecho hay abiertos más de diez procesos desde que entró en vigor la Ley.
Jaime Morey aseguró que los asuntos judiciales de esa naturaleza «van mucho más rápidos que antes». «Además», precisó, «han desaparecido muchos problemas en las comunidades, porque los clásicos morosos de solemnidad, que siempre provocaban problemas en las juntas, con la nueva ley no tienen derecho a voto. Por ello, las juntas no son tan traumáticas como antes». La nueva ley establece que la reclamación judicial de deudas puede tramitarse en dos meses, en lugar de los casi dos años que eran necesarios hasta 1998. Si el deudor no paga no comparece en el juicio, el juez dicta el embargo del piso o local. El moroso no puede votar en las Juntas de Propietarios, ni impugnar los acuerdos que en ella se tomen. Para hacer más eficaz la ley, en las transmisiones de viviendas y locales, el notario exige una certificación expedida por el secretario de la comunidad haciendo constar si ese piso está al corriente de sus pagos.