El president Antich reiteró ayer su voluntad de aprobar antes de un la ley de consells insulars, pidió tranquilidad a Maria Antònia Munar y rechazó que estuviese en «período de prueba» en el Govern tras las tensiones vividas del pacte de progrés como consecuencia de las críticas de la líder de UM.
«Se trata de crear toda una estructura de comunidad, que sea permanente y eficaz, por lo que no es bueno que se cree alarma en esta cuestión», pidió Antich, quien calificó de «complicada» la modificación de la ley de consells. «La ley debe salir lo mejor posible, y si se critica que la ley urbanística urgente no se hizo bien por ir demasiado deprisa sería una incongruencia que ahora se pida rapidez para el texto de los consells», planteó el president del Govern, quien advirtió que si algún partido del pacto está descontento, en alusión a Unió Mallorquina, «será su responsabilidad».
Por otro lado, el president Antich mostró su satisfacción por el compromiso del Ministerio de Fomento de negociar con Iberia la implantación de reactores en los vuelos interislas. Antich ve con optimismo la declaración de dichos vuelos como de interés general, y anticipó que AENA se está planteando crear una terminal en Palma para dichos trayectos.