El Ajuntament de Palma se ha desmarcado del problema de la falta de rentabilidad del matadero municipal de Palma y ha trasladado al Govern balear su intención de no participar en ninguna maniobra para intentar salvar la explotación de Prodisma que acumula más de 475 millones de pesetas en pérdidas.
En un principio, Cort aseguró que, junto con el Ejecutivo balear, crearía una empresa mixta para salvar al matadero pero, posteriormente, se retiró del proyecto porque, según palabras de la concejala de Consumo, Lys Riera, «en el matadero, aunque esté ubicado en suelo municipal se sacrifican animales de toda la Isla por lo que no es un problema que nos afecte sólo a nosotros».
Riera también expresó sus dudas sobre la legalidad de la proyectada sociedad mixta ya que, aseguró, «que las instituciones ayuden a esta explotación privada supondría un caso de discriminación con respecto a otras instalaciones semejantes de la Isla».
Así las cosas a Prodisma, que ha amenazado con cerrar si no recibe ayudas, sólo le queda acudir a la Conselleria d'Agricultura i Pesca para arreglar su situación aunque su titular, Joan Mayol, asegura que el problema es del Ajuntament de Palma porque está en terrenos municipales y la mayoría de reces sacrificadas se consume en Ciutat.