Algunas empresas que instalan, revisan o reparan el gas butano a domicilio siguen concitando las iras de los usuarios de Balears. Las conselleries de Sanitat y Consum y de Agricultura, Comerç i Indústria, que tienen competencia sobre la materia, reciben de forma periódica quejas por parte de los consumidores.
«Es cierto que hay empresas que se dedican a hacer revisiones e instalaciones a domicilio de gas butano», dijo el director general de Consum, Joan Morell. «Algunas de esas empresas cobran cantidades muy importantes y aunque los precios son libres, desde la Conselleria de Consum obligamos que haya una información previa adecuada y correcta a los consumidores», explicó el director general de Consum. Indústria, por su parte, a través de una portavoz, confirmó que habían entrado cuatro o cinco reclamaciones por escrito en las últimas semanas.
Consum recibió un total de 49 quejas en el año 1997 y 25 en
1998.
«Tenemos un decreto, publicado en febrero de 1998», añadió el
director general de Consum, «que establece el derecho que tiene el
consumidor a recibir una total información previa, durante y
después de la reparación a domicilio. Cada vez hay más
especialistas en todo y técnicos en casi nada, que son los que
suelen ocasionar ese tipo de problemas». La mayoría de las quejas
se produce al comprobar el importe de las facturas, demasiado
elevado, según el usuario afectado. En otros casos, el propietario
de la vivienda no tiene tiempo para comparar precios. Y el susto es
mayúsculo al comprobar el coste de la reparación.