Una escasa y mala señalización de los caminos, verjas cerradas que no permiten continuar la ruta, mapas realizados a escalas desproporcionadas y caminos «que se pierden» son algunas críticas que acompañan a ciertos excursionistas que practican el senderismo en Mallorca. Todo ello queda reflejado en una carta que remite una pareja de excursionistas holandeses, de apellido Hinloopen (él, con 60 años de experiencia de las montañas), que relata sus experiencias en las caminatas a pie por las montañas del norte de Mallorca.
«Es una región ideal para caminar, donde uno, como amante de la naturaleza, puede disfrutar de su inmensidad... Lo que ocurre es que en casi todos lados faltan señales. A menudo fue difícil encontrar el comienzo de los caminos, pero una vez que habías encontrado uno, por lo general volvías a perderlo de nuevo.
La pareja tuvo que pasar una noche en la montaña. «La ruta iba hacia la Serra des Teix... no fue nada fácil encontrar el comienzo del camino. La verja del pasadizo estaba cerrada. La caminata hacia la sierra no ofreció en principio ningún problema, pero luego sí. El camino alternativo, el barranco Racó d'en Barona, fue, simplemente, imposible de encontrar. Subimos y bajamos de nuevo. A las 18.00 oscureció y tuvimos que darnos por vencidos. Nos vimos en la necesidad de pararnos donde estábamos hasta la mañana siguiente... Nos dijeron que en los últimos años han ocurrido muchos accidentes. Nos enteramos de que las entidades municipales están en contra de hacer algo en la señalización en las montañas».