En el monasterio de Santa Magdalena de Palma ya se vive la Navidad. El arte que atesoran las monjas canonesas de San Agustín, lejos de quedarse entre sus muros, se difunde a través de las típicas «neules» de papel recortadas y belenes de corte clásico y tradicional.
Sor Pilar Fernández Esquinas, a quien sus hermanas llaman Pili, es quien lleva el peso principal en la confección de «neules», que dicho sea de paso ya se pueden adquirir en el monasterio.
Llama la atención la juventud de la autora en una actividad que requiere experiencia y mucha paciencia. «Comencé con esta artesana faceta el año pasado. No tenía ni idea de cómo se hacían pero sor Nati, que ya tenía alguna experiencia en ello, me enseñó. En nuestro monasterio se llevan haciendo en poca producción desde hace años, lo que ocurre es que nunca lo habíamos hecho público», afirma.
Sor Pili realiza las «neules» a partir de obleas de papel corriente de folio que adquieren troquelado en tres tamaños distintos de 5, 10 y 17 centímetros, aproximadamente.