El jefe de la Agencia de la Energía Atómica de Irán (AEAI), Mohamed Eslami, aseguró este miércoles que las instalaciones nucleares subterráneas atacadas por Israel se encuentran operativas y el Gobierno aseguró que no se enfrenta a problemas de escasez de combustible.
«Las instalaciones nucleares subterráneas de Irán están operativas y nuestros científicos más motivados que nunca», indicó el jefe de la Agencia de la Energía Atómica de Irán (AEAI), Mohamed Eslami, tras seis días de bombardeos israelíes contra instalaciones iraníes. Las palabras de Eslami se producen después de que el Ejército israelí anunciara este miércoles que atacó durante la noche una planta de producción de centrifugadoras nucleares y varias instalaciones de fabricación de armamento en Teherán.
«La moral de nuestros colegas en las instalaciones nucleares es excelente y están llevando a cabo su tarea de manera firme», agregó el responsable iraní. Eslami también tuvo duras palabras para el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, a quien acusó de haber jugado un papel «destructivo» en esta crisis.
«Ha sido suficientemente negligente para ser recordado en la historia. Ha jugado un rol destructivo. Esperamos que esto se recuerde en la historia y que su histórica negligencia llevó a estos malos usos», dijo. Por su parte, el ministro iraní de petróleo, Mohsen Paknejad, indicó que el país «no tendrá un problema» para mantener el suministro a la población y que los iraníes no deberían preocuparse. Paknejad agregó, según la agencia Fars, que en todo caso podría haber restricciones en algunas zonas a largo plazo.
Las gasolineras de Teherán muestran largas colas de vehículos tratando de repostar, algo que han reportado medios iraníes, mientras muchos iraníes han abandonado sus casos, especialmente en la capital, debido a los constantes bombardeos. Israel comenzó en la madrugada de viernes una campaña de bombardeos sobre Irán con el argumento de detener el programa nuclear iraní, a lo que respondió Teherán con una respuesta similar que ha provocado la muerte de más de dos centenares de personas en Irán y de una veintena en Israel.
Por otra parte las autoridades de Irán han anunciado este miércoles la detención de cinco personas por supuesta colaboración con de los servicios de Inteligencia de Israel durante una operación llevada a cabo por la Guardia Revolucionaria en la provincia de Lorestán (oeste), en medio del conflicto desatado por los ataques lanzados por Israel el 13 de junio.
La Guardia Revolucionaria iraní ha recalcado que los sospechosos, descritos como «mercenarios sin escrúpulos», han sido detenidos en las ciudades de Jorramabad, Borujerd y Borud, ante las sospechas de que colaboran con el Mossad, según ha recogido la agencia iraní de noticias Tasnim. Así, ha afirmado que estas personas «intentaban causar el pánico entre la población y dañar la imagen del sistema sagrado de la República Islámica de Irán a través de actividades calculadas en Internet», sin más detalles al respecto.
«Se pide a la población que informe de cualquier caso sospechoso», ha zanjado. El jefe del aparato judicial iraní, Gholam-Hosein Mohseni-Ejei, advirtió el lunes a cualquier persona que «colabore» con Israel para «lograr objetivos siniestros» hará frente al «castigo más duro», antes de destacar que «si una persona es detenida por colaborar con el régimen sionista, será juzgada rápidamente y castigada de acuerdo con las condiciones de la guerra».