Los habitantes de la región de Xianfeng, en Hubei (China) se sorprendieron al descubrir que el agua de uno de sus ríos se había vuelto verde, de un día para otro, sin una razón aparente.
Varios vídeos, del sorprendente fenómeno, se publicaron en las redes sociales este martes, y las autoridades fueron informadas de la inusual tonalidad que presentaba el torrente.
«El caudal del río Yemao era normal el domingo y el lunes por la mañana se tiñó completamente de verde», indicó un testigo en un periódico local.
En un comunicado oficial, los responsables hídricos de Xianfeng explicaron que la impactante coloración del agua se debía a la adicción de un marcador de fluorescencia sódica, un tinte no tóxico que se utiliza para tareas de medición medioambiental.
El uso de la sustancia es parte de un ambicioso plan, que pretende construir un canal que conecte el río Yemao con un embalse cercano. Además, los expertos subrayaron que el colorante es inofensivo y desaparecerá en poco tiempo sin dejar rastro.