Un fuerte terremoto sacudió México este martes agitando edificios en la capital y provocando la evacuación de miles de personas que tomaron las calles por miedo a nuevas réplicas.
El balance de víctimas mortales del terremoto de magnitud 7,1 en la escaña de Richter registrado en el centro y el sur de México ha ascendido a 226, según han confirmado las autoridades locales.
El estado de Morelos ha registrado el mayor número de fallecidos hasta el momento, con 42, mientras que en la capital, Ciudad de México, han muerto otras 30 personas.
A esta cifra hay que sumar otros 26 decesos en el estado de Puebla y otros nueve en el estado de México, tal y como ha recogido el diario mexicano 'Reforma'.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por su sigla en inglés) reportó una magnitud preliminar de 7,4, mientras que el mexicano Servicio Sismológico Nacional (SSN) detalló preliminarmente que el movimiento telúrico fue de magnitud 6,8, aunque después lo amplió a 7,1.
En este caso localizó el epicentro a siete kilómetros al oeste de Chiautla de Tapia, en el central estado de Puebla, aunque sus efectos fueron muy notables en la capital, Ciudad de México, donde varios edificios se vinieron abajo.
Esta vez se sintió con más fuerza que el terremoto registrado el 7 de septiembre, de magnitud de 8,2 en la escala de Richter, dado que el epicentro fue más cercano. Aquel, el más poderoso desde 1932 en México, dejó 98 muertos en el sur del país; 78 en Oaxaca, 16 en Chiapas y 4 en Tabasco.
El seísmo ocurrió poco después de que se realizara un gran simulacro de terremoto en todo el país para recordar el que en 1985 dejó miles de muertos.
Ante esta situación, el presidente del país informó en Twitter que regresa de urgencia a la capital para seguir de cerca la evolución de los acontecimientos.