Policías irakíes capturaron el domingo a un chico de unos 14 años que portaba un chaleco explosivo y que iba a atentar contra una mezquita en Kirkuk.
Dos policías retuvieron al chico, que llevaba los explosivos debajo de una camiseta del astro argentino del FC Barcelona Leo Messi.
El muchacho explicó a los agentes que fue su padre quien le encargó llevar a cabo el atentado y que uno de sus hermanos se había inmolado horas antes en Kirkuk. Un equipo de especialistas desactivó finalmente los explosivos.