El diputado de la mayoría antisiria Antoine Ghanem, murió ayer en un atentado en el sureste de Beirut que se cobró también las vidas de siete personas más y causó heridas a más de 56, según el último recuento de la Cruz Roja libanesa. Ghanem, diputado de las Falanges (partido cristiano), falleció cuando un artefacto explosivo de unos 25 kilos oculto en un Mercedes estalló al paso del vehículo en el que se trasladaba en el área residencial de Horch Tabet en el barrio Sin el Fil, en el sureste de Beirut, dijeron a Efe fuentes policiales.
Este atentado se produce cuando quedan solo seis días para que se reúna el Parlamento libanés en una crucial sesión en la que los diputados deben votar al próximo presidente del país, una votación en la que la mayoría anti-siria y la minoría están profundamente enfrentadas y lejos de poder llegar a un consenso. Junto a Ghanem, en el atentado de ayer murieron los dos guardaespaldas que le acompañaban en su Chevrolet negro con matrícula azul, dijo la cadena de televisión LBC.
Al parecer, según la agencia de noticias ANN, la bomba estaba colocada en un vehículo de la marca Mercedes Benz estacionado en esa zona y fue accionada por control remoto. La ANN apuntó que el cadáver de Ghanem, de 64 años, y algunos de los heridos fueron trasladados al hospital Libanés Canadiense, situado en el barrio de Sin el Fil.
Otros heridos fueron ingresados en los hospitales de Al Machraq, Mar Yusef, Outil Diu y Al Rom.
La LBC mostró imágenes de una espesa humareda y de coches carbonizados, entre ellos el vehículo del parlamentario, que tenía 64 años y llevaba 46 años en política, siempre militando en el partido cristiano de las Falanges. Varios curiosos se agolpaban en torno a los vehículos en una escena en la que también aparecían varios edificios colindantes dañados por la explosión.