AGENCIAS-BEIRUT
El Ejército israelí tomó ayer el control de la localidad libanesa de Maryayun, considerada estratégica por Israel, al tiempo que advirtió de que sus ataques aumentarán y se valdrá de «todos los instrumentos» para hacer frente a la milicia de Hezbolá si los esfuerzos diplomáticos para un alto el fuego fracasan.
Las tropas israelíes tomaron posiciones a primera hora de la mañana en la entrada norte de la localidad, según testigos presenciales, a unos nueve kilómetros de la frontera con Israel, y avanzaron sin encontrar resistencia. Después de tomar Maryayun, los soldados siguieron hacia las cercanas localidades de Blatt y Bourj al Mulouk para ocupar una posición estratégica sobre el valle del río Litani.
Todos estos objetivos son considerados clave por el Mando Norte del Ejército israelí, puesto que el valle es la principal localización desde la cual las milicias chiíes de Hezbolá disparan sus cohetes contra suelo hebreo.
Horas después, Beirut denunció que en el marco de esta operación el Ejército israelí detuvo a unos 350 soldados y policías libaneses.
El ministro del Interior, Ahmed Fatfat, declaró que tropas hebreas entraron por la tarde en la guarnición militar de Maryayun «y pidieron compartirla con tropas libanesas (destacadas) allí». «Las tropas (libanesas) rechazaron (la solicitud) y dijeron que se marcharían, pero el Ejército israelí no las dejó», explicó.
Según Fatfat, entre los retenidos se encuentra el jefe de la fuerza conjunta del Ejército y la Policía, el general de Brigada Adnan Daud. «Los consideramos como cautivos», sostuvo, explicando que ya se han iniciado las negociaciones para conseguir su liberación.