FRANCE PRESS-EFE
Las economías de Francia y Alemania se alejan de la recesión en el
tercer trimestre de 2003. En Alemania, los datos sobre el ligero
crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) son una señal de que
la economía superó ya su peor momento, según interpretó ayer el
Ministerio alemán de Economía y Trabajo del Gabinete del canciller
Gerhard Schröder. Después de tres trimestres consecutivos, en los
que en el primero hubo un crecimiento nulo y en los dos siguientes
un retroceso del 0,2%, el PIB creció por primera vez entre julio y
septiembre de 2003. Según los datos publicados ayer por la Oficina
Federal de Estadística, el PIB aumentó de julio a septiembre un
0,2% ciento respecto a los tres meses precedentes. Aunque el
crecimiento todavía fue extremadamente tímido y en la comparación
interanual el PIB incluso retrocedió un 0,2%, el Ministerio de
Economía subrayó en un comunicado que todos los pronósticos
actuales parten de una mayor aceleración en el cuarto
trimestre.
Destacó también que la incipiente reactivación económica se debió en buena medida a la recuperación que se está registrando a escala mundial, lo que condujo a un repunte de las exportaciones alemanas. Relevante en la reactivación mundial fue la aportación de Estados Unidos que con sus rebajas fiscales contribuyó a impulsar el consumo y las inversiones, dice el comunicado.
En vista, sin embargo, de que en Alemania el consumo todavía no ha recibido el impulso que haría falta para un mayor crecimiento, el ministro de Economía y Trabajo, Wolfgang Clement, volvió a insistir en la necesidad de aplicar las rebajas fiscales previstas por el gobierno. La Cámara Alta, en la que la oposición conservadora tiene la mayoría, ha bloqueado por ahora esta reforma, que, por lo tanto, ha pasado a la comisión mediadora interparlamentaria. Esta comisión, que intentará antes del 10 de diciembre buscar una solución de consenso, la coalición gubernamental y la oposición tienen el mismo número de representantes.