Diecinueve personas han sido detenidas en relación con el atentado del pasado viernes en Nayaf, que causó al menos 83 personas muertos, entre ellos el ayatolá Mohamed Baqr al Hakim, un importante dignatario chií, anunció ayer un oficial de Policía de esa ciudad.
Dicha fuente precisó que la Policía iraquí detuvo ayer cerca de la frontera saudí a un hombre sospechoso de estar relacionado con este atentado.
El oficial de Policía precisó que, con esta detención, son ya 19 las personas encarceladas en relación con el atentado con coche bomba perpetrado ante la mezquita del imán Alí de Nayaf, que dejó a 125 personas heridas.
El sospechoso, que dice ser iraquí y tener 43 años, fue detenido en la frontera con Arabia Saudí y conducido a Nayaf, declaró este oficial.
«Llevaba en el bolsillo veneno y una dirección de una región de Arabia Saudí limítrofe con Kuwait», agregó, aunque no explicó si el hombre venía de ese país o se dirigía hacia allí.
Un periodista pudo ver al hombre con los ojos vendados al llegar a la comisaría de Policía. En Nayaf, donde está muy presente el temor a nuevos atentados, la Policía buscaba ayer tres coches-bomba que podrían haber entrado en la ciudad, declaró el comandante de la policía, Tarek Jamil.
El sábado, la Policía iraquí había anunciado la detención de dos iraquíes y dos árabes no iraquíes, que confesaron haber cometido el atentado. Según el gobernador de la ciudad, los dos árabes pertenecen al wahabismo, una corriente del Islam fundamentalista y muy conservadora. Dio a entender que podrían ser miembros de Al Qaeda, la organización terrorista de Usama bin Laden.