Los principales líderes de la antigua oposición al régimen del depuesto Sadam Husein coincidieron ayer en la necesidad de llenar lo antes posible el vacío de poder que existe en Irak para evitar revueltas y conflictos internos. Así lo expresaron al término de un reunión en Bagdad los representantes de los dos principales grupos kurdos, la oposición chií y los representantes del partido que acoge a la mayoría de las organizaciones opositoras en el exilio.
El líder de esta última agrupación, Ahmed Chalabi, que representa al denominado Congreso Nacional Iraquí (CNI), instó a las tropas norteamericanas y a la Administración civil que encabeza el ex general estadounidense, Jay Garner, a que les ayuden en esa tarea.
Chalabi recordó que es necesario restablecer los servicios básicos como la electricidad y el agua para evitar que se extienda el descontento entre la población civil, que comienza a mostrar grandes signos de inquietud. «Se deben patrullar las calles para evitar que se repitan sucesos como los que se vienen produciendo en Falluja. El Ejército norteamericano es muy bueno en la lucha en el desierto, pero no tanto como policía», agregó Chalabi.