EUROPA PRESS-LONDRES
Los servicios de inteligencia estadounidenses y británicos están
intentando localizar a tres cargueros que se encuentran viajando
por todo el mundo y que podrían llevar en su interior armas de
destrucción masivas iraquíes que estarían siendo trasladadas de un
lado a otro para evitar que sean detectadas por los inspectores de
la ONU, según indicaba en su edición de ayer el diario británico
'The Independent'. Estas embarcaciones, de entre 35.000 y 40.000
toneladas cada una, habrían estado navegando por los océanos de
todo el mundo a lo largo de los últimos tres meses, pero
mantendrían apagada su radio desde el comienzo, en una clara
violación de las leyes marítimas internacionales, para evitar ser
detectados, según fuentes de la industria naviera citados por el
diario.
«Estos barcos han mantenido silencio radiofónico durante un tiempo considerable y han estado navegando en círculos cada vez menores», afirmaron las citadas fuentes al «Independent». El viaje de estos cargueros comenzó a finales de noviembre, sólo algunos días después de que los inspectores de la ONU dirigidos por Hans Blix comenzasen a buscar el arsenal iraquí a su regreso al país, señala el periódico, sin concretar el punto de partida de los navios.
El citado diario afirma que la localización de estos barcos daría al presidente estadounidense, George W. Bush, y al primer ministro británico, Tony Blair, la información necesaria para justificar un ataque contra el régimen de Sadam Husein, ante la gran oposición de la opinión pública al comienzo de la guerra. Los barcos, que fueron fletados por un agente naviero con sede en Egipto y llevan pabellones de tres países diferentes, llevan la radio apagada desde que abandonaron puerto, lo que, sumado a que los capitanes no han dado información sobre sus destinos ni sobre su carga, supone un claro incumplimiento de las leyes marítimas internacionales.