Las bases de las fuerzas internacionales en Afganistán fueron ayer blanco de varios disparos de misil, que no llegaron a provocar víctimas, segú informó la agencia Afghan Islamic Press (AIP) citando testigos presenciales. Según estas fuentes, al menos tres proyectiles han sido disparados en el sector de Matun, cercano al aeropuerto de Jost, en el este del país, cerca de la base utilizada por las fuerzas de la coalición. Estas instalaciones son regularmente blanco de ataques desde la llegada de las tropas internacionales.
Además, otros dos proyectiles fueron disparados contra la base de Gardez, capital de la provincia de Paktia, en esta misma región, y también el aeropuerto de Jalalabad (este) fue blanco de disparos.
De otra parte, dos individuos sospechosos de ser miembros de Al Qaeda murieron ayer en Karachi (sur de Pakistán) y otros cinco fueron arrestados tras un tiroteo con la Policía, en el que también resultó muerta una niña de cuatro años. Fuentes de las fuerzas de seguridad dijeron que sospechaban que los individuos, que eran extranjeros y hablaban árabe, estuvieran vinculados a la red terrorista de Osama Bin Laden, aunque otro portavoz policial precisó que esa relación no estaba clara.
El incidente se produjo cuando agentes policiales intentaron entrar en la vivienda de los sospechosos, ubicada en una zona residencial de la ciudad, y comenzó un intercambio de disparos que se prolongó durante más de tres horas. Los individuos, que tenían en su poder granadas y fusiles automáticos, no fueron reducidos hasta que, con la llegada de refuerzos policiales, las fuerzas de seguridad irrumpieron en el piso y arrestaron a los cinco sujetos. La Policía explicó que la muerte de la pequeña se produjo cuando trataban de evacuar del edificio a una mujer y un niño que habían sido tomados como rehenes por los supuestos terroristas.
En el tiroteo también resultaron heridos tres policías, uno de ellos de gravedad. Se desconoce si el incidente está relacionado con el primer aniversario de los atentados del 11 de septiembre en Washington y Nueva York, de los que EEUU culpa a la red de Bin Laden.
Las autoridades paquistaníes estrecharon ayer las medidas de seguridad y desplegaron fuerzas adicionales en torno a edificios públicos y embajadas en previsión de posibles atentados coincidiendo con el aniversario de los ataques.