La Autoridad Nacional Palestina (ANP) responsabilizó ayer, sábado, al Ejército israelí del intento de asesinato del destacado dirigente de Al Fatah en Cisjordania Maruán Barguti, aunque este país lo niega y ha dado a entender que el objetivo de sus cohetes era un oficial de la Fuerza-17. «El atentado tenía como objetivo al dirigente de Al-Fatah y miembro del Consejo Legislativo Palestino, Maruán Barguti», aseguró esta tarde el ministro de Información palestino, Yaser Abed Rabo. Como consecuencia del atentado israelí, el movimiento Al-Fatah, que preside Yaser Arafat, convocó a todos los palestinos de Cisjordania y Gaza a salir la noche de ayer sábado a la calle para protestar por la «política de asesinatos» y el «terrorismo» de Israel.
En un comunicado difundido en Ramala, el movimiento pide a la población que salga a manifestarse contra los asesinatos selectivos de cabecillas de la «intifada» (alzamiento) palestina. Barguti, también líder de las milicias «tanzim» en Cisjordania, viajaba en un convoy de dos coches por una carretera de la localidad de El Bire, próxima a Ramala, cuando helicópteros israelíes les dispararon entre dos y tres cohetes, según una versión de los hechos.
Otra versión asegura que los cohetes fueron disparados desde una base militar israelí en el asentamiento de Psagot, próxima a El Bire, y una tercera "combinación de ambas" que fueron helicópteros que sobrevolaban el asentamiento. Las fuentes dijeron que el primer cohete no dio en el blanco, lo que permitió a Barguti y a sus guardaespaldas abandonar los coches y buscar refugio. El segundo cohete hizo impacto en el coche de un oficial de la Fuerza-17, Muhamad Abu Halawi, de unos veinte años y escolta de Barguti.
«Esto es una escalada muy grave contra el pueblo palestino pero lo que nosotros aseguramos a los israelíes es que estas acciones no impedirán que los palestinos continúen su lucha contra la ocupación (militar de Cisjordania y Gaza), por su libertad y por su independencia», afirmó Barguti poco después del atentado. Según el Centro Palestino de Derechos Humanos, Israel ha «liquidado» a 56 cabecillas de la «intifada» en unas 38 operaciones de sus cuerpos de elite y la Fuerza Aérea, desde el 29 de septiembre, cuando comenzó el alzamiento palestino.