El presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, advirtió ayer de que la inflación sigue acechando a la economía de Estados Unidos, por lo que serán necesarias más subidas de las tasas de interés. En su testimonio semestral ante el Comité de Asuntos Bancarios de la Cámara de Representantes, Greenspan dijo que la bonanza que vive Estados Unidos no tiene precedentes en el medio siglo que ha estado observando la economía de este país.
La inflación ha mantenido un ritmo muy bajo si se exceptúan los precios de los combustibles, pero Greenspan sostuvo que estas condiciones favorables no pueden durar mucho más, a menos que también disminuya el compás del crecimiento económico, que ha estado por encima del 4 por ciento en los últimos tres años. La bolsa de Wall Street reaccionó con una ligera caída. En su testimonio Greenspan dijo que los mercados financieros no tienen porqué caer cada vez que se anuncian alzas de las tasas de interés, pero sí sostuvo que los valores no deberían subir más rápido que los ingresos de los hogares.
Según Greenspan, los intereses seguirán subiendo gradualmente hasta que sean suficientes para que haya un equilibrio entre la demanda y la oferta de manera que no se acentúen las presiones sobre la inflación. Desde junio pasado, la Reserva Federal ha subido cuatro veces los tipos de interés interbancario, como válvula de alivio de las presiones sobre la inflación, pero Greenspan indicó que esos intereses probablemente deberán subir aún más para impedir un recalentamiento de la economía.