El Gobierno federal y el Bundesbank acabaron «comprendiendo» la subida de los tipos de interés, pero ello no ha evitado que los sindicatos y algunos expertos en economía alemana opinasen que la medida puede contribuir a frenar el ya lento crecimiento del país. El Instituto Alemán para la Investigación Económica (DIW), uno de los más prestigiosos centros de análisis de Alemania, calificó ayer el aumento del precio del dinero como un «claro error y un duro golpe para la recuperación».
«Bueno para Europa, malo para nosotros», titulaba un comentario sobre la medida de un diario berlinés, resumiendo la impresión extendida entre los expertos alemanes de que la subida de los tipos perjudica a su país, mientras beneficia a otros como España o Irlanda, con altos índices de crecimiento e inflación. El propio ministro de Finanzas, Hans Eichel, reconocía ayer que el Banco Central Europeo «debe orientar su política económica hacia el conjunto de la eurozona», al tiempo que recordaba que en Alemania «no se aprecia ningún peligro de inflación».