Volgodonsk, una urbe de 200.000 habitantes del sur de Rusia, se sumó ayer por la mañana a la lista negra de ciudades escogidas como blancos por el «terrorismo indiscriminado» que azota al país y que Moscú atribuye a extremistas islámicos de la rebelde Chechenia. El nuevo atentado, el quinto en las últimas dos semanas, destruyó toda la fachada y varias plantas de un edificio de viviendas, elevando a casi 300 el número total de víctimas que se ha cobrado la guerra terrorista que azota a Rusia.
Con el trasfondo de una psicosis generalizada, el Kremlin negó que estas acciones fueran perpetradas por orden suya, el Ministerio de Defensa dijo haber exterminado a unos 2.000 guerrilleros islámicos que operan en Daguestán y el fiscal general, Vladímir Ustinov, llamó a lanzar el Ejército para «poner orden en Chechenia».
La Policía, que ha puesto en marcha frenéticas operaciones antiterroristas a escala nacional, se incautó de 3'5 toneladas de explosivos en Moscú, mientras que los servicios secretos aseguraron que habían frustrado al menos seis nuevos atentados. Al igual que en la mayoría de las acciones anteriores, la explosión de ayer, esta vez con un camión-bomba, se produjo a las seis de la mañana, cuando la gente estaba durmiendo, frente a un inmueble en el que vivían 437 personas en 144 apartamentos.
De acuerdo con los últimos datos, murieron 17 personas, 310 fueron heridas y 74 de ellas hospitalizadas por la gravedad de su estado. Varios vecinos pueden permanecer todavía sepultados bajo los escombros que remozan los equipos de rescate.
Según testigos, el vehículo fue aparcado junto al inmueble quince minutos antes de la explosión, que dejó un cráter de 15 metros de diámetro, y los restos del camión salieron disparados a centenares de metros, causando daños a otros 20 edificios. El nuevo atentado motivó una reunión urgente del presidente de Rusia, Borís Yeltsin, con su primer ministro, Vladímir Putin, y de éste con la plana mayor del Gobierno y, por separado, con los titulares de las carteras de Interior, Defensa y los servicios secretos.