Washington y Londres ignoraron ayer el inicio del mes del ayuno musulmán, el Ramadán, y la operación «Zorro del Desierto» continuó con nuevos bombardeos contra Irak.
La cuarta ola de incursiones "tercera para el Reino Unido" se inició hacia las 16:30 h hora española, aunque en un principio sólo se tenía noticias de la entrada en acción de las baterías antiaéreas iraquíes.
Poco después, el primer ministro británico, Tony Blair, que parece haber asumido el cargo de portavoz de la operación, confirmaba que cazabombarderos británicos de tipo «Tornado» estaban llevando a cabo una nueva misión en Irak, aunque no precisó la naturaleza de la operación.
Más tarde, en su esperado discurso radiofónico semanal "se barajaba la posibilidad de que anunciara el fin de los ataques para respetar el Ramadán", Clinton ni siquiera mencionó que «Zorro del Desierto» vaya a interrumpirse.
«En el momento en que hablo, nuestros hombres y mujeres de uniforme y nuestros aliados británicos combaten para nuestra seguridad, por la Paz y la libertad en el Golfo», declaró Clinton, que se mostró satisfecho con el resultado de las operaciones.