Un municipio históricamente de los ‘populares' cedió el espacio al centro izquierda en el 2015. En 2019 la explosión de nuevos partidos hizo que el panorama político local quedara totalmente desdibujado y que hasta 9 partidos consiguieran representación. Ante esta situación los partidos empezaron negociaciones y el candidato popular se hizo con la Alcaldía. Un mandato que, como se preveía, ha sido difícil. Igual que lo fue cerrar el gobierno.
Con este panorama, este año irrumpen nuevos partidos por la derecha que pueden dividir aún más si cabe el voto. Sin embargo, este gran número de formaciones también dificulta un pacto por la izquierda y pese que en los anteriores comicios el PSOE fue la fuerza más votada no consiguió gobernar.
Los populares presentan nueva candidata, muy conocida en la localidad, con la idea de conseguir gobernar con más facilidad. Tienen a su derecha a ocho partidos. ASI puede perder su regidor con la división de su partido y la aparición del S'ULL de Rabasco. Llibertat Llucmajor quiere ser necesario, aunque la mala relación con el equipo de gobierno actual puede hacer que no consiga entrar en ningún pacto. El PSOE busca volver a ser la lista más votada e intentar con Més, e incluso con el PI, reeditar el pacto de 2015. Los nuevos partidos quieren hacerse un hueco tras cuatro años de un gobierno que ha salvado la papeleta pero no ha salido airoso y, entre unos y otros, Llucmajor es el municipio de Mallorca con más listas electorales, lo que puede volver a convertir el arte de gobernar en un gran reto para cualquier partido.