El candidato del PP al Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, se ha comprometido, en caso de gobernar, a paralizar el proyecto de la Ley de la Serra de Tramuntana y elaborar una nueva propuesta, con el inicio de «un nuevo proceso de participación directa con los ayuntamientos de la Serra, entidades y los propietarios particulares». El objetivo de su iniciativa legislativa es «garantizar un amplio consenso, donde se tengan en cuenta las aportaciones de todo el mundo», por lo que, bajo su punto de vista, es «imprescindible aumentar la participación municipal y de los alcaldes de la zona, que son quien mejor conocen sus necesidades», ha indicado Galmés en un comunicado.
En este sentido, el candidato 'popular' ha propuesto que la nueva Ley sea «ágil y útil» y «no genere más dolores de cabeza a los municipios y a los propietarios de la Serra». Por ello, Galmés ha anunciado que «reducirá burocracia y simplificará los trámites administrativos y los nuevos organismos de gestión que contempla el nuevo proyecto de Ley, que lo único que hacen es crear más problemas».
Asimismo, el representante del PP ha señalado que «impulsarán», junto con las distintas administraciones, los municipios de la Serra y sus propietarios privados, mediante «políticas que permitan la preservación, recuperación y mantenimiento de su paisaje y patrimonio, además de las actividades del sector primario y los productos que posibilitan el distintivo de Patrimonio de la Humanidad».
Del mismo modo, ha prometido «potenciar» el Consorcio Serra de Tramuntana con un «aumento de la financiación y la posibilidad de programas plurianuales».