Al igual que dentro del mundo de las startups está habiendo un especial interés por parte de los inversores en el sector Fintech (finanzas-tecnología) superando ya las 81 empresas invertidas, estamos viendo que los bancos por fin están comenzando a dar los pasos adecuados en los canales de social media.
Según el estudio “Social Media Banking” de BBVA podemos apreciar dos claros puntos: la necesidad de aportar soluciones tecnológicas a sus clientes y el estudio de los intereses de los mismos mediante las redes sociales.
Como modelo de banking de próxima generación, que se espera que tenga sus primeros “efectos” en este 2016, en los medios sociales se destacan los siguientes tres puntos:
- Interacción con los clientes para conseguir un acercamiento y aportar cercanía, ya que de momento la opción que la gran mayoría escogemos para transacciones importantes es la sucursal.
- Colaboración con personas influyentes para que acerquen el contenido a sus comunidades y conseguir un mayor alcance de los mensajes.
- Cocreación gracias a una mayor intimidad con el cliente, lo que permitirá una mejor adaptación.
Además, gracias a las redes, los bancos pueden conocer mejor los hábitos de sus clientes y personalizar las ofertas.
Por otro lado, el informe nos indica que las redes sociales son buenas pero que nos sirven más para promoción. Es por ello que se aconseja crear redes privadas que podrán aportar a la entidad:
- Poner foco en el tema que el banco quiera tratar.
- Obtener leads en un CRM propio.
- Poder gestionar el 100% de la experiencia, ya que redes como Facebook y Twitter cambian constantemente y nos pueden impedir realizar algunas acciones.
De momento, una de las empresas que lleva la delantera en España es CaixaBank, que recientemente acaba de lanzar un banco 100% digital: ImaginBank y que espera captar 500.000 clientes jóvenes hasta finales de 2017. Ofrece cuenta online y tarjeta gratis con pago desde el móvil y operativa desde las apps.