Es Baluard Museu se reincorpora como escenario del Atlàntida. Después de la proyección en el Aljub el jueves de la última película de Bruce LaBruce, este sábado la oscarizada actriz Liv Ullmann ha impartido una charla en el museo palmesano sobre su carrera, horas antes de que el festival le otorgase el Masters of Cinema de 2022 durante la gala inaugural celebrada en el patio de La Misericòrdia.
Ullmann es una de las grandes actrices de la historia del cine. Musa y mujer del cineasta sueco Ingmar Bergman, recordó ayer sus inicios en el mundo de la actuación. «Era una niña que interpretaba, en fiestas familiares, los cuentos de los hermanos Andersen. Me gustaba, en concreto, La chica de los fósforos. En este momento me di cuenta de que la gente me prestaba atención y les gustaba lo que hacía», reconoce la actriz respecto a su precoz interés por la actuación.
En cuanto al papel de musa de Bergman que habitualmente le otorgan los medios, el programador del Atlántida, Joan Sala, que fue el encargado de entrevistarla en directo en Es Baluard, consideró que se trata de un calificativo injusto que desmerece la amplia trayectoria de la actriz. Ullmann opinó que, pese a que es cierto que su carrera es mucho más dilatada, está bien y «es un honor poder inspirar a alguien». «Él siempre me decía que era su Stradivarius. Sé que fui importante para el cine de Bergman y eso es un privilegio», aseguró la artista, que también habló de la importancia de la isla como metáfora en la obra del cineasta sueco, incidiendo en que existen «varios tipos de isla. Fårö, donde vivió y murió Ingmar, era muy solitaria, pero existen otras», aclaró.
Reconocida como un referente interpretativo del cine europeo, la noruega también trabajó en América, en la industria del cine de Hollywood, demostrando así una amplia versatilidad. En Estados Unidos se codeó con actores muy diferentes a los que la acompañaban en Europa, como Charles Bronson o James Mason. Respecto a los papeles que eligió durante su carrera, Ullmann reconoció que dijo ‘no' a grandes directores como Alfred Hitchcock o Brian de Palma, que estaban interesados en trabajar con ella. «No sé muy bien el motivo por el que les dije que no quería hacer su película. Hitchcock me llamó para su última obra, que al final no terminó, pero creo que pensé que al llegar yo bajaría del avión y no les acabaría gustando. Ha sido más fácil para mí trabajar con gente que ya conocía», admitió.
Respecto a sus otras facetas, como la de directora o escritora, cabe destacar que una de sus películas está en proceso de convertirse en una serie, pese a que es un proyecto en el que no está involucrado la actriz, a diferencia de la serie Liv Ullmann, el camino menos transitado, disponible en Filmin y estrenada en la edición del Atlàntida del año pasado. En esta serie se ve el día a día de esta creadora enamorada del séptimo arte. «He tenido la suerte de disfrutar de la danza, la música, la literatura y de todo lo que te da el cine», explicó la creadora de 85 años, que admitió que actualmente no quiere enfrentarse a ningún proyecto interpretativo al estar centrada en la redacción de un nuevo libro, que será su cuarta publicación. «Me compré un nuevo escritorio y sinceramente tengo muchas ganas de volver a casa y centrarme en la redacción. Será un diálogo de dos personas, que en realidad soy yo misma; la que fui y la que soy ahora», desveló.
Finalmente, cabe recordar que la actriz ya fue invitada en el año 2023 al festival para recibir la mencionada estatuilla honorífica, el Masters of Cinema, pero no pudo acudir a la cita debido a la huelga del sindicato de actores. «Estábamos luchando por el sistema digital para que no deje de lado los derechos de nadie», sentenció.