Uno de los espacios urbanos más transitados de Madrid acoge una instalación de Grip Face, nombre artístico de David Oliver (Son Ferriol, 1989). Desde este lunes y hasta el 11 de marzo, la esquina de la Gran Vía y la calle Alcalá mostrará a los viandantes TSSIYH, una obra de grandes dimensiones del creador mallorquín, representado por La Bibi Gallery.
Se trata de una acción englobada en el Programa de Arte Público de la feria UVNT Art Fair, que se celebrará, entre el 7 y 10 de marzo, en el Centro Cultural Matadero de Madrid.
TSSIYH, una instalación efímera que forma parte del proyecto The shelter is loud in your head, es una construcción arquitectónica de 2,77 metros, por 3,50 y 2,77, que puede recordar a una cabaña o un tipi indio. Grip Face la ha elaborado en madera, hierro, pintura látex, espejos impresos en UVI y resina.
Contrucciones
El trabajo del artista isleño, que este lunes acabó su montaje en el eje Gran Vía-Alcalá-Sol, se inspira «en las construcciones móviles y efímeras que se extienden a lo largo de múltiples culturas, la pieza refleja el retorno de las construcciones efímeras o móviles y su relevancia ante el territorio», según explican desde UVNT Art Fair.
La creación de Grip Face, fijada en plena calle, está compuesta por un interior formado por ocho espejos octogonales. Cada uno de estos conlleva una acumulación de imágenes que juntas generan una historia encriptada.
Los huecos donde los visitantes van a reflejarse están compuestos de manera que cada uno obliga al espectador a redirigir su mirada hacia las imágenes que el artista decide. Un mecanismo similar al del algoritmo, que a menudo decide por uno mismo, perdiendo así –y cada vez más– el hábito de investigar por cuenta propia.
Esta obra pone sobre la mesa varios conceptos: «La pérdida masiva de atención y contemplación por parte de la gran masa social a causa del uso excesivo de los algoritmos digitales que nublan la mente de información deliberada es uno de ellos», indica Grip Face.
«Hace años que el propio artista trabaja en relación a estas ideas, poniendo el foco sobre cómo nuestro avatar digital se empodera por encima de nuestra identidad personal que, en consecuencia se ve contaminada, volviendo líquida esa relación entre lo físico y virtual», finalizan desde La Bibi Gallery.