¿Qué dirían de nostros y nuestro mundo pensadores y pensadoras como Nietzsche, Arendt, De Beauvoir o Aristóteles? No es que Xisca Homar tenga la respuesta, pero sí puede imaginárselo o, al menos, pensar el mundo actual subida a hombros de gigantes. De manera fiel, Homar ha publicado un artículo mensual en el Ara Balears donde reflexiona sobre un tema de actualidad desde la óptica filosófica no solo para su propio interés, sino también para animar a tener «ese momento de pausa e imaginar maneras diferentes de vivir». El sello valenciano Sembra Llibres le propuso editar un libro con sus escritos prologado por Sebastià Portell y el martes 19, en Drac Màgic lo presentará junto a Xavier Riera a las 19.00 horas con el título de Filosofia salvatge.
Ella misma, que además de escribir es docente en la escuela pública, señala que «cada mes pienso algún tema de actualidad que me inquiete y lo examino a través de filósofos que me gustan». Por lo que es obvio que temas de los que hablar no le faltan. «En estos artículos quiero hacer ver la filosofía como una herramienta para pensar el presente» y, por qué no, «transformar el mundo a través de ella».
Temáticas
Las diferentes áreas que toca dependen de lo que esté sacudiendo el globo en cada momento, por lo que hay «contenidos varios», desde «la memoria, la educación, el feminismo, el colectivo LGTBI, la lengua, la política», etcétera.
Lo de ‘salvaje', como reza el título, viene precisamente de una autora, de Marina Garcés, quien explica que la filosofía no académica tiene esta característica, porque Homar no tiene la pretensión de hacer «un libro teórico, sino que intenta acercar la filosofía a la vida, pero sin vulgarizarla, que tenga un lenguaje cercano a la gente que no está formada en ello». Algo que, por otro lado, ejercita a diario con sus alumnos, por lo que no está exenta de práctica.
Sobre el recibimiento que los jóvenes dan a la filosofía en las aulas, Homar confiesa que «tienen mucha predisposición», aunque también reconoce no saber «qué es lo que hace que tengan ese interés», pero se aventura a proponer que «socialmente está muy presente, hay series que hablan de ella, y crea vínculos para poder dialogar». Por ello, no deja de ser alarmante el «arrinconamiento» al que el currículo somete a la asignatura.
Precisamente a ellos, a los más jóvenes, es a quienes la filosofía puede dar herramientas más útiles teniendo en cuenta el nivel de «tristeza, ansiedad y depresión» que se ha formado en ellos ante la nada halagüeña perspectiva de «que tienen que hacerlo bien todo, pero no hay futuro», una de las temáticas que pretende abordar en la actualidad Homar. En un mundo gris, la filosofía puede ser la paleta idónea.