Soleá Morente y Kiki Morente, hijos de la bailaora Aurora Carbonell y el cantaor Enrique Morente, presentan su espectáculo conjunto Dos corazones a un tiempo, un proyecto en el que los dos hermanos se pasean por el concepto de ‘la tradición-traducción'. Cada uno con su personalidad, Soleá ofrece un repertorio de 75 minutos en que viaja desde su primer disco hasta el último, Aurora y Enrique (2021), en el que explora nuevas texturas y sonidos. Por su parte, Kiki hará un recorrido por lo más granado de su repertorio, con especial hincapié en su último disco, El Cante (2021), donde pasa del cante flamenco a los sonidos electrónicos. El Teatre Principal medirá su propuesta este miércoles, a partir de las 20.00, dentro de la primera edición del Festival Paco de Lucía.
Desde la más tierna infancia, Soleá y Kiki fueron criados en la tradición musical familiar, lo que no fue óbice para que pudieran desarrollar un camino propio, mezcla de flamenco y otros estilos. A base de ingeniosa fusión, sus respectivas obras van más allá de la tradición para transitar por sonoridades pop, rock, electrónica e indie. En Ciutat fundirán sus respectivos universos en uno solo que es el de la música y la libertad.
Clan
Tras Estrella, Soleá es la mediana del clan Morente. Nació en 1985 y estudió Filología Hispánica alentada por su padre. Cuenta que su progenitor la llevaba en coche a la facultad y se quedaba de oyente. Hoy Soleá es uno de los rostros imprescindibles del flamenco actual y transversal, su estilo es muy diferente al de su hermana mayor y no se declara cantaora sino flamenca y rockera.
No en vano, apuesta por un cante ecléctico y siente propensión por adentrarse en distintos terrenos artísticos. Entre los reconocimientos que ha recibido destacan el Premio Artes y Letras Fundación Princesa de Girona y el Premio El Ojo Crítico de RNE de Música Moderna. José Enrique es el benjamín, pero todos le conocen como ‘Kiki'. En los últimos tiempos, su proyección mediática se disparó al ser relacionado con la famosa periodista Sara Carbonero. Debutó con el disco Albayzín, un guiño a sus orígenes; el segundo y último trabajo hasta la fecha lleva por título El Cante, en el envolvía los cantes tradicionales con elementos más contemporáneos, como los sonidos electrónicos o incluso el ritmo trapero.