El talento insular es indiscutible y prueba de ello es Adrià Escudero (1992). El actor mallorquín forma parte del reparto de Eternals, la nueva película de la factoría Marvel y dirigida por la ganadora del Oscar Chloé Zhao (Nomadland). Llega hoy a las carteleras de todo el país y está protagonizada por grandes estrellas de Hollywood como Angelina Jolie, Salma Hayek o Richard Madden.
¿Cómo llega usted al reparto de un filme tan importante como es Eternals?
— Hice un workshop, un curso con una directora de cásting en Barcelona y allí conocí a una representante de actores del mercado británico e internacional. Me vio actuar, nos caímos bien y hablamos de la posibilidad de trabajar juntos. Tras ese encuentro regresé a Mallorca y me llamó para ofrecerme una audición para Eternals. Realicé la prueba a través de un self-tape (cásting por vídeo) y al mes me llamó para decirme que me habían dado el papel.
¿Cómo ha sido la experiencia de rodar para unos grandes estudios americanos?
— La experiencia ha sido espectacular, brutal. Lo que más me gustó fue la profesionalidad de todo el mundo, el sentimiento de gratitud que se veía en todos los departamentos por participar en este proyecto. Éramos unas 400 personas y todo se desarrollaba de forma muy fluida. Con toda la presión que tenía, es curioso, pero el sentimiento fue el de empoderamiento. Me dije a mí mismo: ‘Este es mi sitio, esta es mi casa'. La experiencia fue muy gratificante.
En el filme interpreta a Diego, ¿qué nos puede contar del personaje?
— De momento lo único que puedo contar de Diego es que es un humano amigo de uno de los superhéroes. Es un personaje secundario.
¿Qué le ha supuesto a nivel personal y profesional participar en esta producción?
— Tanto a nivel personal como profesional ha significado una gran gratificación y realización. Confianza y sensación de que voy por buen camino, de que estoy haciendo las cosas bien. He recogido los frutos de todo el esfuerzo y dedicación que estoy invirtiendo en mi carrera. Estoy persiguiendo mi sueño y me está funcionando.
¿Qué cree que supondrá su participación en Eternals?
— (Risas) No lo sé. Está por verse. No tengo un grandes expectativas, estoy fluyendo y contento con mi trabajo.
¿Alguna anécdota del rodaje?
— Antes de empezar a rodar estuve dos semanas ensayando una escena de boxeo con Barry Keoghan, uno de los protagonistas. Era una secuencia con coreografía y plano secuencia que llevó mucho trabajo y que ensayaba por mi cuenta para que saliera perfecta. Días más tarde me dicen que se ha eliminado y muy ingenuo envié un mail a la productora preguntando si no se habían equivocado. Aunque los primeros días fue duró aceptarlo, me enseñó que dentro de los rodajes hay cosas que están fueran de control.
¿Diría que este papel ha sido el más importante de su carrera hasta la fecha?
— Sin duda. A nivel de proyección y de producción es espectacular. Es una película de Hollywood, de Marvel Studios, que ven millones de personas. En cuanto a interpretación no es mi trabajo más potente. Encarnar a este personaje con toda la presión que supone un proyecto tan grande ha sido una experiencia de gran crecimiento personal, pero he tenido trabajos con mucha más importancia en cuanto a acting.
¿Cuáles son sus proyectos futuros?
— El más cercano es Sincero, un cortometraje independiente que estamos rodando en Barcelona en estos momentos. Mi personaje, el protagonista, explora la masculinidad tóxica y la deconstruye. Es un personaje gay que va explorando realidades paralelas y pasa por diferentes etapas y espectros dentro de su masculinidad. Es un corto que tiene mucha proyección, tenemos mucha fe y creemos que llegará a buen puerto.