Juan José Padillla, El ciclón de Jerez o El Pirata. El torero se ha despedido de Pamplona en una tarde apoteósica.
La debilidad de los pamploneses por Padilla es recíproca, por eso el diestro quiso despedirse de su plaza talismán. Lo hizo toreando a los Jandilla en una corrida en la que compartió cartel con Cayetano y con el peruano Roca Rey.
La expectación era máxima por ver al de Jerez después de la escalofriante cogida que sufrió hace unos días en Arévalo en la que perdió parte del cuero cabelludo. A pesar de los treinta puntos de sutura en la cabeza, el diestro reapareció con un pañuelo bucanero negro.
El Pirata, un ídolo en la capital navarra, se despidió de su público con el honor que supone abrir su última puerta grande en la Monumental de Pamplona.