Los restauradores del proyecto de intervención en la basílica de Sant Francesc de Palma han identificado nuevas policromías anteriores a 1619 en el sepulcro de Ramon Llull.
El proyecto, subvencionado por el Departamento de Cultura, Patrimonio y Deportes del Consell de Mallorca, también ha hallado un nuevo tipo de piedra e incisiones que corresponden a símbolos y marcas de la técnica escultórica utilizada en la construcción del monumento.
Es uno de los cinco proyectos financiados a través de la Línea de Subvenciones para la Conservación y Restauración de Bienes Culturales relacionados con la figura de Ramon Llull, que el Departamento de Cultura ha puesto en marcha este 2017. En concreto, se trata del proyecto de mayor alcance con una inversión de 15.000 euros.
Esta línea de subvenciones se mantendrá el próximo año. «Lo importante es mantener en buen estado estas piezas relacionadas con Ramon Llull y, al mismo tiempo, dar difusión a las tareas de restauración», ha recalcado la directora insular de Patrimonio, Kika Coll,
Se ha actuado en la basílica de Sant Francesc, pero también con piezas de otras parroquias en Santa Margalida, Sa Pobla, Sencelles y del monasterio de Santa Isabel.
El proyecto de intervención que se ha presentado este jueves en el sepulcro de Ramon Llull ha consistido en una serie de estudios preliminares -sobre el estado de conservación del monumento, de las condiciones ambientales, análisis de sales, etc- para después llevar a cabo una primera fase de intervención directa que ha consistido en la limpieza de los depósitos de suciedad superficial así como en la eliminación de restos de ceniza adheridas.
Como resultado se han identificado policromías que estaban escondidas por una pátina posterior y que cubrirían parte de la estructura arquitectónica así como elementos antropomórficos ubicadas en el cuerpo inferior del monumento.
También se ha descubierto la técnica pictórica de estas policromías: utilizaban cargas de sulfato cálcico, tierras naturales y diferentes proporciones de blanco de plomo, a las que añadían unos pigmentos que daban la coloración. Mayoritariamente se aplicaban a pincel con tintas planas, aglutinadas con cola animal.
Entre los hallazgos también figura la identificación de un nuevo tipo de piedra en el monumento. Hasta ahora en el sepulcro se habían identificado la piedra de Santanyí y el alabastro y esta última intervención también ha descubierto la utilización de marino blanco, ubicado en el registro del bestiario del cuerpo inferior.
Las tareas de análisis y de limpieza llevadas a cabo han permitido a la vez identificar incisiones que corresponden a marcas de la técnica escultórica utilizada.