Los arqueólogos que investigan el barco romano del siglo I conocido como el pecio de las «llumetes» de Porto Cristo han identificado a Caius Iulius como el carpintero de ribera responsable de construir la nave, según una de las conclusiones de la excavación subacuática que se ha desarrollado en el yacimiento.
«Lo que se conoce como el pecio de las 'llumetes' de Porto Cristo podría ser un barco de la época del emperador Nerón, de unos treinta metros de largo y, posiblemente, hecho por el fabricante de barcos Caius Iulius, según indican las tres inscripciones que este año se han localizado en las maderas que aún se conservan en el fondo submarino», ha explicado el arqueólogo subacuático Javier Rodríguez, ha informado el Ajuntament de Manacor en un comunicado.
Por su parte, Sebastià Munar, codirector del equipo científico que dirige las excavaciones del yacimiento ha explicado que se trata de una embarcación romana del siglo I dC que iba cargada de ánforas, «llumetes» (lamparillas), vino, aceite y materiales de obra que procedía del sur de la Península Ibérica. Ha destacado que «es la única excavación arqueológica que estudia un barco de época romana en las Islas Baleares».
Por su parte, la concejal de Educación y Patrimonio, Catalina Riera, ha destacado la necesidad de cuidar los yacimientos: «Tenemos que ser conscientes de que los tesoros que tenemos en las costas de nuestro municipio son de todos y es importante que los conservemos porque, como en este caso, pueden contener información única en el mundo».
Este año, los arqueólogos han podido localizar la proa de la nave y han encontrado una cuerda del barco, de cuatro metros, de la que sólo se conoce una similar en todo el Mediterráneo.
Además, han podido recuperar una hoja de cuchillo y localizar tres inscripciones con el nombre del fabricante de la embarcación. «Hasta ahora nunca se habían encontrado tres inscripciones en el mismo barco romano», ha explicado Rodríguez. En ellas se puede leer Caius Iulius y las letras T, E y S, «que pueden indicar el lugar donde se ubicaba el taller de donde salió el barco», ha indicado.
Durante un mes, un equipo formado por arqueólogos, restauradores, especialistas en estudios de materiales, en arqueología naval y algunos voluntarios han trabajado en el fondo marino de Porto Cristo.
El objetivo es seguir con la investigación de este barco antiguo que realiza el Instituto Balear de Estudios en Arqueología Marítima (IBEAM) y que el Museo de Manacor pueda dar continuidad a las labores para desalar las piezas, restaurarlas y registrarlas para exhibir «los importantes hallazgos que surgen de este yacimiento submarino de Porto Cristo», ha explicado la concejala de Cultura y Turismo, Antonia Llodrà.
Los arqueólogos han destacado que la arquitectura naval de la embarcación se encuentra en muy buen estado de conservación y esto posibilita que se haga un estudio cuidadoso de cómo era el barco romano.
«El objetivo de las excavaciones no es sacar el barco a la superficie ni extraer muchas piezas porque que los objetos han permanecido unos dos mil años en el mar y sacar las piezas puede ponerlas en peligro», ha explicado el codirector del excavación Sebastià Munar.
Aún así, las piezas con posibilidades de conservación se depositan en el Museo de Historia de Manacor, «donde se desalinizar, estabilizan y se restauran para que puedan durar muchos años en las vitrinas y los almacenes del Museo», ha añadido su directora, Magdalena Salas.
El proyecto cuenta con financiación del Consell de Mallorca y del Ajuntament de Manacor.