Sin olvidar sus raíces, conservando lo más genuino y con la seguridad del trabajo bien hecho, Coti Sorokin llega a la Isla para presentar su cuarto trabajo, Gatos y palomas, el que define como el mejor disco de su carrera. El compositor, confesado admirador de Bob Dylan, se encuentra en plena gira española y tiene como proyectos futuros la gira americana en octubre y la publicación de un libro.
"¿Cómo se presenta el concierto en Mallorca?
"Con muchas ganas, siempre me hace ilusión coger un avión y viajar al Mediterráneo. He actuado en la Isla varias veces y la gente siempre me ha tratado muy bien. Recuerdo con especial cariño el concierto que hice en Pollença.
"¿Cómo será su puesta en escena?
"Es un concierto basado en canciones. Sin novedades escénicas porque su único argumento son las canciones.
"¿Cuál es la esencia de su último trabajo 'Gatos y palomas'?
"La esencia es la convivencia entre seres antagónicos y entre las diferentes partes de un mismo ser, sin la pretensión de ponerme metafísico. Trato esa parte de la vida mundana, terrenal y realista representada en el gato, frente a la más fantástica, utópica y liberal de la paloma.
"¿Coti es más paloma que gato?
"Trato de conservar la fantasía, las ganas de jugar, la rebeldía y los sueños. Tengo un lado volador muy sano y eso es fundamental para poder crear y jugar con la música. Ser músico es conservar ese instinto de niño.
"¿En qué ha evolucionado Coti?
"Sobre todo, en experiencia de vida, aunque también de trabajo.
"¿Sentía la necesidad de venir a España?
"Sentía la necesidad más que de ir a un lugar, de salir de un lugar. El vagabundeo fue lo que me motivó a salir de Argentina. Llegue a España y encontré un lugar excepcional y no me ha ido mal...