MARIANA DÍAZ
El artista, muy popular por la utilización de una iconografía ligada al paisaje, -de cuyos colores se enamoró al llegar a Mallorca-, y a la cultura popular de la Isla, también ejerció el mecenazgo cultural, además de ser el impulsor del concierto del Torrent de Pareis y socio fundador de la Obra Cultural Balear (OCB). Valldemossa ha sido elegida como sede de la Fundació Coll Bardolet impulsada por el artista, el Ajuntamnet local y el Govern.
Coll Bardolet había nacido en la localidad catalana de Capdevànol en 1912. Al comenzar la Guerra Civil se exilió a Francia y se instaló en Tours, donde pintó los paisajes del Loira y expuso su obra. En 1939 se estableció en Bruselas, estudió en la Real Aacademia de Bellas Artes de la ciudad y pintó paisajes urbanos de influencia impresionista. En Madrid pasó por Bellas Artes de San Fernando, donde aprendió grabado. Fue en la Isla donde desarrolló su talento para 'mirar' el paisaje mediterráneo y sus intensos colores, especialmente de la Serra de Tramuntana.
Otra de sus líneas de trabajo características giró en torno al folclore mallorquín, que desarrolló mediante el dibujo «de trazo rápido, línea ágil y fuerte colorido», como se explica en la Gran Enciclopedia de la Pintura y la Escultura a les Balears. Está técnica la plasmó el artista en «un gran número de papeles, tratados mayoritariamente con acuarela de colores primarios sobre fondo blanco».