NURIA ABAD
Miró-Sert, la construcción de una amistad es el título de la exposición que la Fundació Pilar i Joan Miró inauguró ayer con motivo del quincuagésimo aniversario de la construcción del taller de Joan Miró en Palma, proyectado en 1956 por el arquitecto Josep Lluís Sert. La muestra, que se podrá visitar hasta el próximo 18 de marzo de 2007, incluyen planos y maquetas de los proyectos de Sert, obras originales de Miró y otros artistas, fotografías, revistas, objetos personales y parte de la correspondencia que mantuvieron ambas personalidades.
«Desde los años 30, Joan Miró soñó con tener un gran taller en el que poder trabajar con telas de gran formato. Este sueño se hizo realidad en 1956 de la mano de Josep Lluís Sert, un proyecto que supuso que Miró se instalase definitivamente en nuestra Isla». Con estas palabras abrió Magdalena Aguiló, directora de la Fundació, el acto de presentación de esta exposición, que contó con la presencia de la alcaldesa de Palma, Catalina Cirer, acompañada de una nutrida representación de Cort; el nieto de Miró, Joan Punyet; el presidente de la Fundació, Rogelio Araújo; la directora general de Cultura del Govern, Catalina Sureda; Pere A. Serra, presidente editor del Grup Serra; y Joan Daviú, jefe de Obras Sociales de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM).
Moneo y Freixa
Entre los asistentes se encontraban, asimismo, los arquitectos Rafael Moneo, cuyo edificio conforma, junto al taller de Josep Lluís Sert y la posesión de Son Boter, el espacio de la Fundació Pilar i Joan Miró; y Jaume Freixa, que codirigió junto a Sert el proyecto de la Fundació Joan Miró de Barcelona, cuya directora, Rosa Maria Malet, tampoco quiso perderse el estreno de esta muestra, comisariada por Federic Climent, presidente de la Demarcación de Mallorca del Colegio Oficial de Arquitectos de las Illes Balears (COAIB). También asistieron la directora de Es Baluard, Marie-Claire Uberquoi, y los galeristas Joan Guaita, Joan Oliver Maneu, Jero Martínez, Alejandra y Maribel Bordoy.