El aeropuerto de Palma inauguró ayer por la mañana la Sala Miró, una nueva área exclusiva próxima a las puertas de embarque que pretende, además de albergar a los pasajeros, rendir un homenaje al pintor catalán, difundir su obra y recordar su relación con Mallorca, isla en la que vivió durante 27 años, entre los usuarios.
La Sala VIP Miró cuenta con un monolito realizado en acero cortén y acero inoxidable que recrea la firma del artista y que ha sido diseñado por Aníbal Guirado. Además, presenta la reproducción de un mural basado en un boceto que el autor catalán concivió para la ciudad de Cincinati en 1947 y en el que se inspiró Joan Gardi Artigues para hacer el mural que se encuentra en la cafetería de la Fundació Pilar i Joan Miró de Palma. El espacio cuenta con la colaboración de la Successió Miró y de la Fundació. Según fuentes de aeropuerto, la sala albergará obras del artista catalán en el futuro.
«Esta sala permitirá ayudar en la difusión de la obra de Miró», afirmó Nemesio Suárez, director del aeropuerto. Joan Punyet, nieto del autor, destacó que el espacio será un atractivo más y un complemento a la «oferta de sol y playa» de la isla. «Con esta sala cumplimos el sueño de Miró: transmitir el arte contemporáneo», según Rogelio Araújo, concejal de Cultura del Ajuntament de Palma.