Angela von Neumann, John Ulbricht, Alceu Ribeiro, Barbara Weil, Muriel Ten Cate, Elis Jakobson, Ben Yakober, Jannick Vu, Jim Bird, Nils Burwitz o Bruno Zupan son algunos de los artistas foráneos que llevan muchos años viviendo y creando en este pequeño territorio que un día les atrapó. Hoy, a las 19.30, se inaugura una exposición que reúne su obra y la de otros muchos creadores, hasta 56, en el Museo Krekovic. Comisariada por Maria José Corominas y Ana Bàrbara Cardellà con pintura, escultura y fotografía, se titula «Mallorquins d'adopció». Corominas apuntó que «no se basa en una tesis, busca mostrar lo que cada uno es capaz de hacer, lo que importa es el trabajo de cada uno».
Desde los primeros en descubrir Mallorca, como los citados, hasta los casi recien llegados, como la joven colombiana Maria Uribe, algunos han expuesto varias veces aquí o han recibido honores. La lista es larga y, entre ellos, dos fallecidos en el último año, Matti Klarwein y Julien Meunié. Pero no todos se sienten reconocidos en este lugar de adopción. Así lo explicaron ayer algunos de los que acudieron a la rueda de prensa de presentación. José Manuel Fernández «Rasta» puso el dedo en la llaga cuando dijo que las galerías locales «apuestan más por el personal de aquí», una afirmación compartida por quienes estaban ayer, la pintora Cris Pink y los escultores Isabel Ballester o Falko Haase. «El rechazo es de los galeristas, no del público», apuntaron todos, con una crítica a la programación cultural «nefasta de los últimos años, menos mal que tenemos un aeropuerto que nos conecta con los centros de arte de Europa y el resto del mundo». Haase, que llegó en 1960, resumió las intervenciones explicando que «el arte es una cosa muy seria, como la medicina o la ley, y las autoridades hacen demasiado caso a los no profesionales, sobre todo cuando se trata de la vía pública». El clima, el paisaje, la luz y la paz que antes se respiraba aquí les enganchó a una Mallorca ahora «masificada de cemento y coches». Hoy, los que viven dispersos por la Isla han prometido estar presentes.