Mike Parker Pearson, profesor del departamento de Arqueología y Prehistoria de la Universidad de Sheffield (Inglaterra) y experto en ritos funerarios y ceremonias de enterramiento, participó en el congreso que tiene lugar en Deià bajo el nombre de «Islas en la prehistoria» con la ponencia «Early Humans Impacts in Madagascar» («Primeros impactos humanos en Madagascar»).
"¿Cómo se está desarrollando este encuentro
internacional?
"Es una oportunidad única, ya que no
se produce de una manera muy frecuente que arqueólogos de todo el
mundo se encuentren en una reunión de estas características y para
hablar de temas diferentes al mismo tiempo que comunes. Es muy
interesante descubrir que hay gente que tiene los mismos intereses
que tú. El de la arqueología es un mundo muy cerrado y nos
conocemos todos. Aquí te das cuenta de que en realidad somos muchos
más.
"Todas las ponencias se refieren al concepto de isla.
¿Creen que se puede sacar alguna conclusión?
"Es muy
difícil establecer puntos en común entre lugares tan diversos,
ricos y lejanos como son las diferentes islas del mundo, pero aún
así me atreviría a afirmar que una característica que comparten
todas ellas es que todos sus habitantes tienen una clara
consciencia de identidad isleña. Dejando de lado las coincidencias
geográficas de aislamiento más o menos grande, las islas también
comparten el hecho de conservar manifestaciones muy particulares
que no se encuentran en los continentes. Un ejemplo de ello son los
talaiots de Menorca.
"Usted habla del impacto de la aparición de los humanos
sobre el ecosistema.
"En Mallorca hay un caso de
especie animal que desapareció con la llegada del hombre, como es
el Miotragus Balearicus, que tuvo que competir con los animales
domésticos del hombre.
"¿Qué se puede sacar de la experiencia de conocer el
pasado?
"Hay una cita que resume muy bien lo que
pienso al respecto: «Investigar el pasado es como ir a un país
extranjero, porque siempre vuelves a casa». El pasado nos enseña a
no cometer los mismos errores, pero el problema es que no siempre
somos capaces de aprenderlo. Lo que ha ocurrido hace muchos años
nos informa sobre nuestro mundo y nos confronta directamente con el
pasado.