La Seu es una de las grandes pasiones del pintor mallorquín Pau Montserrat. A través de su obra pictórica, la catedral de Palma ha sido una constante: interiores, exteriores y sus detalles más significativos han pasado por la paleta del artista. El centro de exposiciones de ses Voltes acoge, a partir de mañana, una muestra de su arte, centrado en el edificio gótico más representativo de Palma. «La he pintado unas 130 veces», asegura el creador plástico.
Pau Montserrat, nacido en 1923, dice que «la Seu es muy extraña, no obstante me encuentro muy bien cuando estoy dentro. Ha sido una fuente de inspiración constante». A la presentación de la exposición acudió la regidora de Cultura del Ajuntament de Palma, Carme Feliu, quien dijo que: «Sus visiones de la Seu reflejan su amor por un entorno y un espacio. Montserrat es también un artesano del gremio de la madera, de sus herramientas saca imágenes de gran expresividad». El pintor, en su faceta de tallista, ha realizado también los marcos de sus cuadros y diversas piezas elaboradas en madera policromada.
«Como en las personas, la parte que más me gusta de la Seu es la cabeza "es decir, el baptisterio" junto a los sepulcros neogóticos de Jaume II y Jaume III».
En la exposición podrán admirarse piezas como sus «Columnes de la Pietat i la Maternitat» o el crucifijo «Influència romana». Pero es a través de su paleta de colores, donde el pintor ofrece su visión de la catedral. De formación autodidacta, mantuvo contactos con Furió, Ochoa y Bernareggi.