La obra de Peter Shaffer, «Comèdia negra», llega al Auditòrium a partir del próximo día 21 de septiembre y se mantendrá en cartel hasta el 26. Los actores catalanes Mercè Comes, Enric Majó y Eduard Farelo, más conocidos por su participación en la telenovela «Nissaga de poder», explotan su vertiente humorística en un enredo que tuvo una gran acogida en Barcelona durante la temporada pasada.
La obra, producida por la compañía Tricicle, Dagoll Dagom y Anexa, ha sido dirigida por Tamzim Townsend, que cuenta sus montajes por éxitos. Además de los anteriormente citados, «Comèdia negra» cuenta entre su reparto con actores como Resu Belmonte, Pep Cruz, Esteve Ferrer, Pep Salvà y Montse Esteve.
Eduard Farelo, el actor que encarna a uno de los personajes más vilipendiados de la serie «Nissaga de poder», señaló ayer que «mi papel en la tele es muy dramático, no me permite sonreír mucho. Me cuesta bastante poner siempre cara de amargado. Pero en 'Comèdia negra' cambio totalmente el registro. Aquí encarno a un escultor que espera la oportunidad de su vida para triunfar. Pero un inoportuno apagón de luz le hará convivir con otras personas en una misma habitación. La situación, obviamente, será caótica y tremendamente divertida».
Sobre otros proyectos, Farelo asegura que está preparando actualmente el musical «I love you, you are perfect now change», que será estrenado a principios de diciembre.
Otra de las actrices que intervienen en la obra teatral es Mercè Comes, también popular por haber encarnado a Agustina en «Nissaga», una mujer con veleidades literarias que ha gustado mucho entre el público. «Hacer teatro es gratificante, hace ya tiempo que estamos haciendo 'Comèdia Negra' y todos los actores somos como una familia. Mi personaje es una mujer gris que se emborracha involuntariamente y luego resulta que le gusta. Después, hace cosas en la oscuridad que no haría en condiciones normales. De hecho, todos nos comportamos de forma diferente cuando nadie nos está viendo».
Comes, que asegura conocer muy bien Mallorca, dice que está encantada con Agustina. «Me encantaría ser como ella. Es una persona generosa que se ha sabido ganar bien la vida. Y nunca se le han subido los humos», resalta.
La actriz cree que la caracterización de ambos personajes no condicionan para nada al espectador: «La gente, cuando empieza a ver la obra de teatro tiene el prejuicio de encontrarse con mi personaje televisivo, pero al cabo de un rato entra en la historia y enseguida me ve con otros ojos».