El primer premio Nadal Batle i Nicolau fue entregado ayer en un multitudinario acto que tuvo lugar en un abarrotado auditorio del Centre de Cultura Sa Nostra. El acto se abrió con una palabras de Vicent Partal, que habló de «Nadal Batle, un home de visió». Explicó Partal que Batle fue siempre un visionario en el campo de la informática, en unos años en los que nadie apostaba por ella. Terminó definiéndolo como «un ben parit, una expresión muy valenciana».
A continuación, Rosario Huesa, secretaria del jurado, leyó el acta con el que se otorgó este galardón, dotado con un millón de pesetas, al joven doctor en Bellas Artes Joan Alberich por su obra «Fotografia a fi de segle. Art, discurs i fotografia en el trànsit de la postmodernitat», donde reflexiona sobre el papel de la fotografía y el fotógrafo en la sociedad actual, que ha sufrido numerosas trasnformaciones y donde han aparecido diversos medios de comunicación. A continuación, Gabriel Oliver, presidente del Consell Social de la Universitat de les Illes Balears, entregó el diploma al ganador.
En el mismo acto, Pere J. Batle, director general de Sa Nostra, fue el encargado de presentar el libro de Joana Maria Roque «Les notes d'un rector».
El público estuvo formado, en su mayoría, por miembros del cuerpo universitario, desde miembros directivos a profesores, presididos por el rector Llorenç Huguet. Pero también hubo políticos: el conseller de Cultura, Manuel Ferrer; el vicepresidente del CIM, Pere Sampol; o conseller del CIM, Damià Pons.